Jengibre: raíz ancestral para digestión, inflamación y energía metabólica

El Jengibre (Zingiber officinale) es una raíz utilizada desde hace miles de años en la medicina ayurvédica y tradicional china por sus múltiples propiedades terapéuticas. Rico en gingeroles y shogaoles, compuestos bioactivos con efectos antiinflamatorios, antioxidantes y digestivos, se ha convertido en un suplemento natural de gran valor para mejorar la salud gastrointestinal, reducir la inflamación crónica y estimular el metabolismo de forma segura.

A nivel digestivo, estimula la producción de jugos gástricos, alivia náuseas, previene mareos y mejora el vaciamiento estomacal, siendo ideal para personas con digestión lenta, dispepsia o malestar intestinal. También se utiliza con frecuencia como antiemético natural en embarazadas, pacientes oncológicos y personas con intolerancias digestivas leves.

Sus propiedades antiinflamatorias lo hacen útil en afecciones articulares como artritis, dolor muscular y recuperación post-entrenamiento. El jengibre modula la producción de prostaglandinas y citoquinas inflamatorias, ayudando a aliviar el dolor sin los efectos secundarios de los AINEs. Además, favorece la circulación sanguínea, ayuda a regular los niveles de glucosa y tiene efectos termogénicos que estimulan la quema calórica.

El extracto de jengibre se estandariza habitualmente al 20% de gingeroles, garantizando potencia y eficacia. Puede combinarse con cúrcuma, pimienta negra (bioperina), canela o enzimas digestivas para potenciar su efecto. Ideal para quienes buscan un apoyo digestivo, antiinflamatorio y metabólico desde una raíz natural con siglos de respaldo clínico y cultural.